MARATÓN MASPALOMAS

 

II MARATÓN MASPALOMAS

EL VIAJE.-

 

         Este maratón no entraba dentro de mis planes ya que mi objetivo era el Maratón de Frankfurt a celebrar el 30 de octubre, pero…. un accidente el día que salíamos en dirección a Barcelona hizo que no pudiera realizar dicho viaje. Pero, como ya tenía toda la preparación realizada, tuve que improvisar un sustituto lo más cercano posible. Y mirando el calendario, el de Maspalomas, en Gran Canaria, me venía muy bien, en cuanto a fechas, 20 de noviembre, no así por las características del mismo.

Así que, sin pensarlo mucho y teniendo además vuelo directo salimos de Oviedo el sábado en dirección al aeropuerto de Asturias para coger el avión que nos llevaría al aeropuerto de Las Palmas, saliendo a las 14,30h en un vuelo muy cómodo, llegando a Las Palmas a las 16,20, con lo cual tuve la precaución de llevar un tupper con macarrones que estaban buenísimos. Gran Canaria nos recibe como no podía ser de otra manera, con un día espléndido, cogimos un taxi para ir hasta el hotel, en poco más de media hora llegamos, Hotel Faro Lopesan, delante mismo de la playa de Las Meloneras y junto al faro, donde estaba la salida y llegada de la maratón.

A última hora de la tarde nos fuimos a la Feria del Corredor, que se encontraba en el Pabellón de Las Meloneras, a cinco minutos del hotel. Había buen ambiente con numerosos corredores, sin agobios en las colas para recoger el chip y la bolsa. La bolsa que me dieron con la camiseta y poco más, había algún que otro stand deportivo, pero nada del otro mundo.

Así que con las mismas nos fuimos de allí en busca de alguna pizzería, que por allí cerca hay varias. Y para el hotel que había que madrugar mucho (la salida era a las 8h) ya que como estaba cerrado el comedor tuvieron la deferencia de subirme a la habitación un pequeño desayuno, que con lo que compré en la tienda me arreglé.

       Dormí bastante bien, cuando tocó el despertador, ya estaba despierto, lo primero que hice fue mirar por la ventana a ver qué día teníamos, era todavía de noche, di buena cuenta del desayuno y tuve tiempo suficiente para organizar toda la intendencia.

LA CARRERA.-

                 Salí del hotel a las  7,30 h. ya que la salida era a las 8h, y estaba al lado; la mañana era fresca y el cielo azul, totalmente despejado. Calenté un poco, algunos estiramientos y al cajón de salida. Mi cajón estaba en la segunda línea de salida donde estaba el globo del 3,15, aunque prácticamente estaba a dos pasos de los primeros, que eran muy pocos. La música a todo volumen, buen ambiente, no llegábamos a mil corredor@s,  y suena el disparo de salida…. En 4 segundos paso por el arco de salida, y comienza la carrera; íbamos por una calle bien ancha, sin grandes agobios, a ver si logro coger el ritmo adecuado, mi idea es salir alrededor de 4´50´´/km. Nos dirigimos hacia la zona de la playa, las dunas, en dirección al Campo de Golf, donde entramos en el km 4. El recorrido por allí era muy bonito, más o menos llano, así que tico el Primer Cinco mil  y marca  23´45´´, lo cual significa una media de 4´45´´, por debajo de lo previsto. En el primer avituallamiento tomo un par de tragos de agua que aunque no apetezca hay que beber igual.

La mañana sigue siendo fresca aunque ya voy entrando en calor, salimos del campo de golf en el km 8 y llegamos al km 10. Tico este segundo Cinco mil en 24´06´´, a 4´49´´/km. Sigue la buena temperatura para correr, aunque ya se siente el calorín. Entre los kms 10 y 14 vamos por una avenida larga de ida y vuelta, con subida y bajada, y nos plantamos ya en el km 15; este Tercer Cinco mil lo paso en  23´54´´, a 4´47´´, vamos bien, y sobre todo con unas sensaciones buenas. Seguimos por esta parte de las afueras de la ciudad, con una avenida en el km 16 en fuerte subida, que va a hacer daño en la segunda vuelta. En el 19 pasamos por ExpoMeloneras, con un nuevo giro (de los muchos que hay), me tomo el primer gel antes de que llegue km 20, el Cuarto Cinco mil lo paso en 24´07´´, a 4´49´´/km. El próximo objetivo ya será el paso por la Media Maratón, aunque no veo el Arco (es que no lo había), paso por la alfombrilla de la Media en 1h.42´03´´, a 4´50´´/km, ¡¡ya sólo quedan otros 21.097 mts!!!. Estamos ya en la segunda vuelta, en dirección a Las Dunas (km 22), donde está Dolores haciéndome unas fotos; le digo “tira un viento del demonio”, efectivamente, se levanta una brisa marina que ya no nos abandonó en toda la carrera, y el sol ya pegaba duramente, esto se pone feo…Por el km 25 volvemos a entrar en el Campo de Golf, lo tico en  24´33´´, a 4´55´´. Estamos en las dos horas, todavía queda un mundo, el calor ya aprieta y el viento continúa pegando fuerte, y comienzan a molestarme las zapatillas, mal asunto. El km 30 ya está a la vista, tico el Sexto Cinco mil en 25´47´´, a 5´09´´ por encima de 5´/km. Me tomo el segundo gel aprovechando un avituallamiento y comienza  otro problema, me dan tirones los tibiales, no sé si es por el dolor que tengo en los dedos o porque se está haciendo muy dura la carrera, otro nuevo giro en una larga avenida; este Cinco mil en 26´37´´, a 5´19´´/km, estamos ya sobre las dos horas y cincuenta minutos,  pero vienen ahora los kms duros, los del sufrimiento, hay que apretar los dientes y tirar p´adelante. Tomo el último gel ya sólo piensas en la meta, los 3.30 se me van a escapar pero hay que seguir, no rendirse nunca; llega el k37 con una subida hasta llegar al k39, por la Estatua de Colón

                Me van dando unos tirones musculares que nunca me había pasado, tomo un gel de cafeína y sales para intentar llegar a la meta como sea, abandonar nunca!!.  El km 40 al alcance, 29´24´´, a 5´53´´/km,  sólo quedan dos kms que son muy favorables.  Entré en la zona de la playa , no veo ni oigo a Dolores, que según me dijo pasé al lado de ella y me gritó.   ¡¡!META¡¡  con 03:37:04, agotado, con fuertes dolores de los tibiales y los dedos deshechos. , entro en la zona vallada y voy hacia la carpa de los fisios a ver si me dan un masaje para aliviar los dolores, y miro entre el público y veo a Dolores que me hace varias fotos.  Cojo unas mandarinas y plátanos y bebida y nos vamos hacia la playa, que está al lado, quiero meter las piernas en el agua, a ver si me alivia un poco.

Y cuando estamos tomando el sol, me manda un whassap Alfredo dándome la enhorabuena por la victoria (¿), y efectivamente, había ganado en mi categoría, vaya sorpresa!!!

            HASTA EL PRÓXIMO  .….         JAPÓN

MARATÓN DE VIENA

 

Esta maratón de Viena fue un tanto especial, por culpa de una lesión que hizo que prácticamente no pude entrenar nada. De hecho, no realicé preparación específica alguna, ni una serie, sólo rodajes y tres tiradas largas de 26 y 30 kms. La única razón por la que fui es porque íbamos un grupo de amig@s y me daba rabia no acompañarles, así que me dije, bueno, voy a salir y si llegando a la MM no me resiento, continúo hasta el final, con lo cual saldría sin ningún objetivo de tiempo, simplemente terminarla con un crono decente.

  Salimos de Oviedo el viernes por la mañana en dirección a Santander para coger el vuelo con Ryanair directo a Viena. Eramos un grupo numeroso, en un coche íbamos Dolores y yo con Pili y Urbano, y en el otro coche iba Alfredo y Marián con Ana y Leandro (ellos fueron la noche anterior y se quedaron a dormir en Santander, tenían miedo perder el avión…).

El vuelo sin problemas, en el aeropuerto nos estaba esperando un Uber para llevarnos al hotel, un NH muy céntrico y bien situado. El día estaba nublado, un poco lluvioso, nos fuimos a comer a un mercado donde había algún bareto, y empezamos con la pasta.

Por la tarde salimos hacia la Feria del maratón, que estaba un tanto alejada, en busca de los dorsales y tantear un poco el ambiente. Entramos sin problemas, las colas para recoger el chip y la bolsa no eran grandes e iban muy rápido, no valía mucho, la bolsa del corredor de lo más pobre que vi, no había ni camiseta ni nada, propaganda solamente, así que nos fuimos rápido

                Para cenar habíamos reservado en una pizzería cerca del hotel, y con las mismas nos volvimos para el hotel, que había que recuperar fuerzas.

A la mañana siguiente no madrugamos mucho, bajamos a desayunar y después Dolores y yo salimos a dar un paseo por la ciudad, que ya conocíamos pues ya estuvimos hace años. El resto del grupo prefirió coger un bus turístico, de esos que te hacen una turné por la ciudad y no te enteras de nada… Quedamos para comer en un restaurante que ya conocíamos,  junto al Belvedere, buena comida, y buena cerveza, en un sitio muy agradable, y para el hotel a descansar toda la tarde. La cena, también habíamos reservado en otra pizzería cercana al hotel, más pasta y cerveza y para el hotel que mañana iba a ser un día muy duro.

Dormí bastante bien, cuando tocó el despertador, ya estaba despierto; lo primero que hice fue mirar por la ventana a ver qué día teníamos, era todavía de noche y bajé a desayunar, eran las 6,30 h, de los primeros, el desayuno muy completo, el de siempre y a la habitación a prepararse. Pedimos un taxi pues la salida estaba en las afueras a mucha distancia, le costó al taxista llegar pues estaban todas las calles cortadas y hubo que dar un gran rodeo, pero llegamos a tiempo.

LA CARRERA.-

                La carrera sale a las 9,00, los cajones bastante mal organizados, de hecho nos colocamos en uno que no era el nuestro, y a calentar que hacía un poco frío.

                Como dije, en esta maratón tenía un único objetivo, que era el terminarla lo más dignamente posible siempre y cuando la lesión me lo permitiera, así que salí relajadamente con la idea de coger un ritmo próximo a 5´20´´/km, para terminar por debajo de 3.45. Y así fue, transcurrían los kms a ritmos previstos entre 5´20 y 5´25 y con buenas sensaciones.  De hecho la Media la paso en 1.51.30, a un ritmo de 5´17´´, o sea, más rápido de lo previsto. El circuito era llano, sin repecho alguno, pasamos por el circuito donde Kipchoge bajó de las dos horas (aunque no fue reconocido). Por el km 16 pasamos por el imponente Palacio Schonbrunn y por el 20 ya en plena ciudad, nos vamos por la calle donde teníamos el hotel, y allí están Dolores y Marián animándonos. Desde aquí nos vuelven a sacar de la ciudad en dirección al Prater, son los peores kms ya que son rectas largas de ida y vuelta (en una de ellas veo a Alfredo). En esos kms 30-33 hay varios giros de 360 º y me voy hasta los 5´35´´ pero enseguida recupero el ritmo, ya estamos en el 40, un poco de subidina  y enfilamos los dos últimos kms a buen ritmo. La recta de llegada emocionante como siempre, mucho público a los lados, y como no, allí están Dolores y Marián animando como locas, casi me da tiempo a parar, ya que iba bien, y entro en meta, con gran alegría, pues no las tenía todas conmigo. Allí están ya Alfredo (que no consiguió bajar del 3.30) y Leandro, que hizo una buena carrera, y Urbano, gran carrerón (3.16.13). Con un tiempo de 3.43.31, y a un ritmo de 5´18´´/km, quedando el 1699 de la general y el octavo en la categoría, así que más que contento.

Hacemos las fotos de rigor y nos vamos hacia el hotel donde nos espera una buena y merecida ducha.

En resumen, una maratón diferente a todas las realizadas hasta ahora, pero que me dejó un gran sabor de boca, fui totalmente relajado a unos ritmos que eran prácticamente los de un entreno por Caces y en una ciudad muy bonita y con una compañía inmejorable, qué más se puede pedir… bueno, sí, que nos respeten las lesiones, lo demás ya lo ponemos nosotros de forma altruista.  

 

Ahora a pensar en la próxima, para el otoño del 2022, Frankfurt???